Buenos días tribu.
Nunca me gustó aquello de “dar consejos”, pero… qué cojones, no paráis de pedirme consejo a diario en mensajes y correos, y sobreentiendo que lo necesitáis y que confiáis en mí en ello. Así que, voy a atreverme mejor dicho a “proponer consejos”.
Para que después hagáis lo que creáis más conveniente. O al menos, para que le deis varias vueltas sobre ello y encontréis nuevas formas de pensar y actuar.
Entonces, mi consejo hoy es: Esfuérzate para hablar y esfuérzate para callar. Así pues, ANTE LA DUDA: SILENCIO.
Las palabras, expresiones y los términos son importantes. Y debemos, entre todos, hacer un gran esfuerzo. De lo contrario tendremos que esforzarnos mucho más por enmendar dicha falta del esfuerzo que no quisimos hacer en primer lugar.
Intento también entender por qué se da tal fenómeno y elaboro una pequeña teoría.
Incluso en mi caso doy siempre una relevancia relativa a los comentarios en redes sociales, tanto a los positivos como a los negativos, pues sé que la mayoría surgen de un impulso y que no son comentarios pensados sosegadamente. Seguro que veis a diario decenas o incluso cientos de comentarios sobrantes, frases sobrantes o conversaciones igualmente sobrantes.
Hagamos todos ese esfuerzo, yo me pongo al frente, por supuesto.
Nos vemos mañana, seguro. PAZ.
